Discernimiento (Juzgar) y el Cristiano
Es muy importante que Satanás destruye tu habilidad de discernir cosas espirituales en el proceso de echar a perder tu vida. Esto es semejante al sistema de defensa que tiene el cuerpo humano. Entre todo circulando en el cuerpo, el cuerpo tiene poder de destruir células dañinas, pero éxito o fracaso depende en primero discernir lo que es parte del cuerpo (bien), de lo que hace daño del cuerpo (mal). Ataca el mal y deja lo bueno libre. Pero primero hay que discernir si es enemigo o amigo.
Cuando la Biblia habla de juzgar, habla de una abilidad adentro de las personas para analizar correctamente situaciones y doctrinas, conducta y práctica, y discernir si está adentro de la voluntad de Dios el Padre, o no lo es.
¿Es discernimiento un mal o necesario?
Hay un movimiento adentro del cristianismo que quiere imponer y persuadir las personas a creer que el discernimiento es un pecado de cristianos legalistas, y la masa del cristianismo es más sabio y no lo hace. Pinta los que practican el discernimiento como extremistas que causan nada más problemas sin fin por este asunto. (Ve folleto Ort04 Neo-evangélicos y Ecumenicos)
es una franca discusión de las muestras de su vida cuando alguien es realmente salvo.
Salv72 ¿Cómo es nacer de Nuevo?
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Pero cuando el cuerpo no identifica los peligros que le atacan, entonces esto es esencialmente la SIDA. La SIDA en sí no mata directamente, sino deja cualquier cosa, aun un tos agravar hasta neumonía y la muerte. Así igualmente es un cristiano o iglesia que no hace discernimiento, o no hace correctamente el discernimiento.
Lejos de ser un lujo no necesario o un mal, el discernimiento es la única cosa que guarda la vida espiritual, y guarda la salud espiritual. Discernimiento (Juzgar) y el Cristiano
¿Debemos juzgar o no?
Ve folleto cp26 ¿Es correcto juzgar las acciones y doctrinas de otros?
Si estudias el folleto en el vínculo arriba, vas a entender qué tan bíblico y esencial es de juzgar. A la verdad, debemos demostrar por nuestras vidas, palabras, y actitudes (gustos y desgustos) lo que es esta buena voluntad de Dios. En Romanos 12:1-2, la Biblia hace claro que nuestra tarea es de desmostrar o «comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta.» La falta de vivir las normas de Dios en tu vida cristiana es simplemente un pecado. No puedes vivir las normas de Dios sin saberlas y reconocerlas (ejemplos del bien o del mal), o sea, sin que disciernes.
Hch 17:11 Y éstos eran más nobles que los que estaban en Tesalónica, pues recibieron la palabra con toda solicitud, escudriñando cada día las Escrituras para ver si estas cosas eran así.
Dios ve los cristianos que estudian la Biblia para verificar las prácticas y doctrinas a su alrededor como «más nobles». Simplemente puesto, son estrellas en los ojos de Dios, porque no dejan las cosas sin analizar, sino checa si es bíblico (al agrado de Dios) o no.
¿Qué es la diferencia entre buen juicio y mal juicio?
El críterio para un buen discernimiento es de trae y enfocar y enfatizar lo que dice la Palabra de Dios sobre un asunto.
Jn 7:24 No juzguéis según las apariencias, sino juzgad con justo juicio.
Hay un «justo juicio» y hay un «injusto juicio» o un juicio incorrecto. El juicio que es aceptado por Dios es uno que va más allá que las apariencias hasta el fondo del asunto. Satanás es un experto en poner cosas bonitas en el superficie, y tratar de engaña su veneno con dulces encimita. Tenemos que ser tenaz en seguir algo hasta que llegamos al fondo de todo.
Otras consideraciones:
- Deu 1:16-17 «juzgad justamente» es de no hacer acepción de personas.
- Deu 16:18-19 «justo juicio» es no hacer acepción de personas, no tuerzas el derecho, no tomas soborno (igualdad a todos en todo, no cambiar las cosas a tu parecer, y no hacer cosas para provecho propio.
- 1Co 11:30-31 la falta de juzgar, especialmente analizar y juzgando aun tu propia vida, es la razón porque nuestras vidas tienen el juicio de Dios sobre nosotros.
La Diferencia entre discernir y juzgar y condenar
1Co 4:5 Así que, no juzguéis nada antes de tiempo, hasta que venga el Señor, el cual aclarará también lo oculto de las tinieblas, y manifestará las intenciones de los corazones; y entonces cada uno recibirá su alabanza de Dios.
Debemos aclarar que nuestra tarea como hijos de Dios es de bien reconocer lo que es la voluntad de Dios, y lo que no es. No nos toca de condenar a las personas a un castigo, ni tampoco de discernir sus intenciones (motivos). La examinación del corazón pertinece a Dios, no al hombre. Dios es el único que puede ver adentro de los pensamientos, intenciones, actitudes, y motivos de una persona, y Dios es quien que juzga a estas cosas.
Nosotros somos limitados a juzgar hechos, dichos, y creencias según checa o no checa con la Biblia. Discernimiento (Juzgar) y el Cristiano
1Co 14:29 Asimismo, los profetas hablen dos o tres, y los demás juzguen.
1Co 14:37 Si alguno se cree profeta, o espiritual, reconozca que lo que os escribo son mandamientos del Señor.
O sea, DIos directamente nos manda de juzgar todo, especialmente lo que es dicho en un servicio en la casa de Dios. El chiste es de discriminar entre lo que es la voluntad de Dios, y lo que no es, y las personas espirituales van a reconocer lo que son los mandamientos del Señor.
¿Cómo juzgar espiritualmente?
1Co 2:11 Porque ¿quién de los hombres sabe las cosas del hombre, sino el espíritu del hombre que está en él? Así tampoco nadie conoció las cosas de Dios, sino el Espíritu de Dios. 12 Y nosotros no hemos recibido el espíritu del mundo, sino el Espíritu que proviene de Dios, para que sepamos lo que Dios nos ha concedido, 13 lo cual también hablamos, no con palabras enseñadas por sabiduría humana, sino con las que enseña el Espíritu, acomodando lo espiritual a lo espiritual.14 Pero el hombre natural no percibe las cosas que son del Espíritu de Dios, porque para él son locura, y no las puede entender, porque se han de discernir espiritualmente. 15 En cambio el espiritual juzga todas las cosas; pero él no es juzgado de nadie. 16 Porque ¿quién conoció la mente del Señor? ¿Quién le instruirá? Mas nosotros tenemos la mente de Cristo.
Mas allá que poder juzgar, debemos juzgar como un mandamiento de Dios. Para juzgar, uno necesita más que ser salvo, necesita andar en el Espíritu Santo. Cuando uno busca de permanecer en Cristo, y busca obedecer a Dios, entonces el Espíritu Santo abre tu entendimiento. Esto depende con que la persona está activamente y intensamente estudiando la Palabra de Dios para imponerla en su propia vida. El espiritual juzga todas las cosas. Cuando conocemos las cosas espirituales de Dios por la Biblia, entonces el Espíritu Santo es activa al momento a oír o ver algo de confirmarlo como correcto o incorrecto, la voluntad de Dios o no. Esto es nuestra conciencia obrando.
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