Diáconos Calificados (versión 2)

1 Ti. 3:1-7

*La palabra «diácono» en griego quiere decir «siervo». El primer puesto de diáconos en la iglesia local se encuentra en Hechos 6:1-4. Diáconos fueron puestos para ayudar a los apóstoles con ciertas cosas, haciendo posible que los apóstoles se concentraran más a la Palabra de Dios y a la oración, ¿Qué calificaciones deben tener los diáconos para que puedan servir en la iglesia?





I. HONESTOS – v. 8

*Un hombre respetado y de buen testimonio en la iglesia y entre la comunidad. Proverbios 22:1; Eclesiastés 7:1; Hechos 6:3


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El primer punto en su carácter para un diácono es que no es mentiroso. O sea, su palabra es fiel. Lo que habla y lo que es tiene una concordancia entre ellos dos.

El trabajo de diácono es de servir a la iglesia. Va a las casas de las personas para ser los ojos del liderazgo de la iglesia, e igualmente sus manos. Todo esto depende de que (1) fielmente puede informar a los líderes de qué es qué, y (2) cuando la iglesia decide de hacer algo respeto a un miembro, por ejemplo, de darles ayuda económica, entonces el diácono puede ser fiel en cumplir con tal tarea.

II. SIN DOBLEZ* – v. 8

*Doblez es resultado de:

1. Un corazón doble – Salmo 12:1-4

2. Doble ánimo – Santiago 1:8

La idea es que los diáconos manejan dinero a veces, y en otras ocasiones, van a tratar con asuntos delicados. Tienen que ser confiables en lo que dicen, en sus tareas que los líderes les dan de hacer, que se trata de dinero honestamente sin tomar dinero para ellos mismos, y sobre todo, que no son chismosos de lo que saben y hacen para el Se´ñor.

Doble ánimo habla de gente que pueden insertar acciones para que ellos mismos pueden ganar. O sea, si el pastor dice a un diácono, «lleva x cantidad de dinero a la viuda fulana«, y le da el dinero, y entonces no hay infidelidad de la parte del diácono en sustraer parte para sí mismo.

III. NO DADOS A MUCHO VINO* – v. 8 («OINOS» – JUGO DE UVA, NO FERMENTADO)

*LA BIBLIA ENSEÑA ABSTINENCIA TOTAL – Proverbios 20:1; 23:29-35

Aunque la Biblia habla de vino, entendemos que realmente el problema aquí es una adicción al alcohol. Sea vino, o cerveza u otro alcohol. Igualmente, será obvio que también implica drogas.

La gente que usa alcohol o drogas no manejan sus vidas bien. Estas adicciones son (1) porque tiene problemas que no pueden manejar o resolver bien, y usa alcohol para olvidarse del problema. (2) Hay gente que tiene demasiado dinero, más que necesitan realmente, y busca pura recreación, diversión, y entretenimiento. Probablemente, una persona tal no buscaría ser un diácono, pero la idea en este requisito es que no tiene adicciones de cualquier tipo.

IV. NO CODICIOSOS DE GANANCIAS DESHONESTAS – v. 8 Proverbios 15:27; Eclesiastés 5:10; 1 Timoteo 6:10.

Hay una fundación en las creencias que todo hombre de Dios tiene que tener. Tiene que querer tan fuertemente que las declaraciones de Dios en la Biblia son verdaderas que su vida se conforma totalmente a estas declaraciones. Siempre las creencias (doctrina) deciden la conducta de uno (la práctica).

Ahora el punto aquí es que el mundo va a acabar, y Dios va a hacerlo. Dios va a hacer un nuevo mundo y cielo, y las cosas terrenales ahora que son la mayor parte de nuestras vidas, todas van a desaparecer. Si es cierto esto, y la persona cree en esto, su fuerza y voluntad para agarrar las cosas mundanas es muy ligera. Vivimos con dinero, pero no ponemos nuestras esperanzas en el dinero y posesiones de este mundo sino lo del cielo.

El Pastor y los diáconos y todo el liderazgo de la iglesia tienen que manifestar una vida libre de avaricia.

V. CON LIMPIA CONCIENCIA – v. 9; Hechos 24:16; 1 Timoteo 1:5, 19

Una persona salva vive su fe. Pero como va desarrollando su vida espiritual, la conciencia de tal persona es donde se ve sus verdaderas creencias. Si cree la Biblia que no debe robar, su conciencia no le deja robar.

Entonces que sea limpia, o sea sin ideas y motivos ajenos de lo que Dios nos manda es muy importante.

VI. SOMETIDOS A PRUEBA PRIMERO – v. 10; 1 Timoteo 5:22.

La iglesia es una comunión o compañerismo de personas que la gente entra de su propia voluntad, pero aceptamos lo que las personas nos dicen, y muchas veces hay malas personas que no piensan nada en mentira, especialmente si por la mentira y ser disfrazado como oveja, puede tener acceso al dinero. Entonces, probamos a la gente y desechamos las personas que no son fieles en todo, las que son engañosas, mentirosas.

VII. IRREPRENSIBLES – v. 10; Filipenses 2:15; Santiago 1:27

Cuando estamos examinando y probando a las personas para ver si son fieles y buenos siervos, tenemos que tachar a las personas que tienen elementos de acusación justa en sus vidas. O sea, la norma es muy alta para el servicio del Señor, y cuando una persona falla, todavía puede ser salvo, pero no entra en la confianza de la iglesia para repetir las fallas. Las fallas en hechos son porque hay fallas en su carácter moral. Un diácono no debe tener fallas o manchas visibles. Debe vivir santa y piadosamente su vida.

VIII. ESPOSAS HONESTAS – v. 11

El Nuevo Testamento pone el enfoque en orar y estudiar (predicando) para el pastor. Creo que es válido de hablar de un equipo pastoral, y puede ser otros ancianos que entran en la enseñanza con el mero pastor (1 Timoteo 5:17).

Pero el enfoque para el diácono es de servir o ministrar a la congregación. Ellos son los ojos, los oídos, y las manos de la iglesia, del equipo pastoral. Es muy importante que las esposas de los diáconos sean honestas, mujeres prudentes, sabiendo que todo lo que oye (cuando anda con su esposo, un diácono) no es para repetir.

IX. MARIDOS DE UNA SOLA MUJER – v. 12; Mateo 19:4-6

La Biblia tiene una sola norma, que un varón se casa con una mujer, y que esta mujer sea su esposa hasta que la muerte los separan. Solamente así es libre de casarse de nuevo.

X. GOBIERNAN BIEN SUS HIJOS Y SUS CASAS – v. 12; Proverbios 22:6; Efesios 6:1-4

Tenemos que entender que los diáconos son personas que sirven a los miembros de la iglesia, ayudándoles con sus problemas y necesidades cuando se presentan. Esto es igual con los padres que tienen hijos, y hay elementos muy importantes implicados en esto. Primeramente, escucha bien. A veces escuchando no es suficiente y la persona tiene que indagar más al fondo de que es el problema realmente. Segundo, tiene que desembolsar recursos (dinero), y hacer actividades (necesita ir al dentista por ejemplo). Tercero, necesita saber cuando decir no, es algo que uno no puede hacer, no debe hacer, o simplemente es muy difícil o imposible de hacer.

Todo esto se refleja en lo que un padre hace con sus hijos. Tiene que mantenerles contentos, pero no compadeciéndoles tanto que se echan a perder.

XI. EJERZA BIEN EL DIACONADO – v. 13

*Su ganancia:

1. Un grado honroso

2. Mucha confianza en la fe

El diaconado no es algo que uno usa para procurar a bienes, dinero, fama, control, etc. para sí mismo. Es un servicio que uno hace para el Señor en servir al cuerpo de Cristo.




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