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Prov 1:7 El principio de la sabiduría es el temor de Jehová; Los insensatos desprecian la sabiduría y la enseñanza.comentario

Desde el Comentario de Proverbios
Temor de Jehová es principio de sabiduría

Lo más importante de Todo 1:7

Prov 1:7 El principio de la sabiduría es el temor de Jehová; Los insensatos desprecian la sabiduría y la enseñanza.

Este versículo es el propósito del libro. Es la base para lo demás del libro. Nosotros podamos saber y ser sabio solamente cuando tenemos un profundo respeto hacia a Dios. La sabiduría de todos los paganos es necedad, porque la verdadera sabiduría empieza con Dios y la reverencia para Dios. Sin esto no hay nada de provecho en ningún consejo.

1:7 “el principio” – Actualmente no se puede lograr sabiduría sin empezar con el reconocimiento de la existencia e imposición de Dios sobre la vida y este mundo. Allí es donde empieza toda la sabiduría, y toda sabiduría gira alrededor del poder y control de Dios sobre la realidad de la vida. Además, no hay un esquema de sabiduría aceptable que no se edifica sobre la realidad de revelación divina por parte de Dios a la humanidad. Además de esto, la idea de “principio” NO ES como una carrera, donde los coches empiezan en la línea y se va de ello. Sabiduría tiene el temor de Jehová como su principio controlador. Es la línea donde la sabiduría empieza, pero también la sabiduría es las líneas que marcan los carriles por toda la carrera. El temor de Dios es la única fundación para sabiduría, y es lo que guía toda persona en la carrera.




El conocimiento es una relación que depende en revelación y es inseparable para el carácter moral. Muchos inconversos han acumulado conocimiento y tienen una base de entendimiento básico, pero el verdadero conocimiento descansa sobre la relación con Dios que es la revelación sobrenatural (las Escrituras) y solamente en esta se puede establecer esta fundación. Otros países en el medio oriento y alrededor del mundo se han producido escritos sabios, pero ninguno se edifica sobre la base de una relación personal con Dios.

Yendo más allá que conocer personalmente a Dios para obtener la sabiduría, vemos que la Biblia se edifica la necesidad de fe en este Dios. La fe es una creencia, pero también es confianza como en una persona que uno conoce, y es fiel para conducirse según el carácter moral que uno se identifica en él. El necio es alguien que aborrece este orden divino para la vida y rechaza la autoridad de Dios como la guía de su vida.

Pro. 2:6 Porque Jehová da la sabiduría, Y de su boca viene el conocimiento y la inteligencia

Los hebreos creyeron que hay tres formas de obtener la sabiduría: (1) de observarla en la naturaleza y de analizar la conducta humana, (2) en analizar relaciones entre credos (creencias) y la realidad, y (3) por medio de revelación directa de Dios.

Mat. 7:13 Entrad por la puerta estrecha; porque ancha es la puerta, y espacioso el camino que lleva a la perdición, y muchos son los que entran por ella;

El gran científico Bacon dijo, “no hay posibilidad de encontrar la verdad como meta si no existe primero, una humildad (como un niño) como punto de donde empezar.” Todos los grandes científicos quienes descubran grandes verdades de la ciencia tienen que empezar con el admitir su falta de dominar el campo de trabajo donde andan ellos, y empezar con un reconocimiento de quien es el dueño de todo (Dios), y quien es que va a darles entendimiento y victoria en descubrir la verdad. Encontramos que el entendimiento y buen manejo de las cosas de esta vida nos quedan ocultos hasta que tenemos un ardiente amor para quien se hizo todo ello. Las puertas de Conocimiento y Sabiduría son cerradas, y solamente abren a quien que las toque con la Reverencia. El reconocimiento es algo bueno que logra el ser humano, pero la sabiduría solamente viene donde hay un profundo amor para Dios.

Hay un tipo de sabiduría inmoral que hombres pueden acumular sin la aprobación de Dios, pero siendo afuera de Dios, se basan en lo que es provechoso solamente en esta tierra, por lo pronto, pero no abarca de ser de provecho eternamente, para aquí y ahora, y para luego, y después de la muerte.

Para el buscador de la verdad con motivos correctos, hay un reconocimiento de que él no es conmovido tanto por los eventos de esta vida, sino que ha fijado su vista sobre la estrella de la verdad, que es alto y sobre todos nosotros, reinando sobre nosotros. Él está entrando en un área que es espiritual, y es más importante que los eventos pequeños de esta vida. Él entra en el trato de lo eterno.

Esto es una profunda reverencia para Dios antes de empezar a investigar la verdad de Dios. Solamente así puede uno aprender algo de la ciencia, e asimismo solamente así puede uno aprender de la sabiduría moral.

Sal. 14:1 Dice el necio en su corazón: No hay Dios. Se han corrompido, hacen obras abominables; No hay quien haga el bien.

A fin de cuentas, peleamos en contra del ateísmo y el agnosticismo. El ateo niega que existe Dios, y el agnóstico niega que “SI EXISTE DIOS” se pueda conocerle. Atrás de los dos conceptos es rebelión, porque si logramos a aceptar que existe Dios y que nos ha dado revelación de su santa voluntad, somos obligados a obedecer esta revelación o quedarnos en la condenación de Dios. Estos prefieren no admitir que son rebeldes y condenados por negar la existencia de Dios, o negar que se pueda saber lo que es el placer de Dios (su voluntad).

Todo esto es para no tener que cambiar la vida para entregar nuestra voluntad pecaminosa para hacer la voluntad de Dios.

Pero según las Escrituras, si quitamos la idea central de Dios y su comunicación para con la humanidad, entonces no podamos tener la ciencia verdadera. Nuestro mundo llegará a ser irracional, sin la posibilidad de existencia de la sabiduría. Todo será en vano, y él entraría una depresión y desesperación tremenda. Sin empezar con la admisión de Dios, no hay verdad, y no hay verificación de cuál será la verdad.

1:7 “temor de Jehová” – “Temor” es de tener reverencia para algo. La idea es más bien reverencia que temor. Tenemos temor de los rayos del cielo porque sabemos lo que pueden hacer en dañarnos si tenemos descuido alrededor de ellos. Incluye una relación correcta con Dios, y no nada más miedo de Dios.

En los dos lados es importante de fijarnos en Dios: (1) si nos conducimos para ser hallado agradable delante de Dios, todo va bien para nosotros. (2) Si ignoramos los principios y el Santo Ser de Dios, igualmente vamos a recibir de Dios, pero maldad y castigo. El mundo en sí menosprecia y desprecia a Dios y su Sabiduría. Burlan los caminos y principios de Dios como escorio.

Ahora no es suficiente de admitir que hay un ser supremo, sino de darle reverencia. Hay hombres quienes admiten la existencia de Dios, pero no se sujetan a Él. Para aprender la sabiduría, tenemos que empezar con una sumisión a Dios, a su forma de cosas, a su moralidad, o carácter moral.

Job 28:28 Y dijo al hombre: He aquí que el temor del Señor es la sabiduría, Y el apartarse del mal, la inteligencia.

Sal. 111:10 El principio de la sabiduría es el temor de Jehová; Buen entendimiento tienen todos los que practican sus mandamientos; Su loor permanece para siempre.

 Versículos mencionando el temor de Jehová: Pro. 1:7, 29; 2:5; 3:7; 8:13; 9:10; 10:27; 14:2, 26-27; 15:16, 33; 16:6; 19:23; 22:4; 23:17; 24:21; 31:30.

Ecl 12:13 El fin de todo el discurso oído es este: Teme a Dios, y guarda sus mandamientos; porque esto es el todo del hombre.

Entendemos que todo lo que Dios obliga al hombre, todo el trabajo del hombre puede ser resumido en un solo concepto, tema a Dios. En este punto solamente el hombre puede encontrar paz con Dios, felicidad en esta vida, y tranquilidad en su alma y para con otros seres humanos. Temor de Jehová es principio de sabiduría

¿Qué es el temor de Jehová?

Es esta reverencia afectuosa por la cual, el hijo de Dios se dobla humildemente y con cuidado a la ley de su Padre. Su ira es tan amarga, y su amor tan dulce, que no hay otra opción menos de buscar su placer, su voluntad, y por el alto peligro de no alcanzar la voluntad de Dios, uno se pone a una santa vigilia para que no peque en contra de Dios (Heb. 12:28-29). Esta vigilia entra en cada área de la vida, del espíritu, del pensar, del hacer, de uno. Para el cristiano, es el principio de toda actividad, moción, y emoción, y es el fin y meta de toda.

1Co. 10:31 Si, pues, coméis o bebéis, o hacéis otra cosa, hacedlo todo para la gloria de Dios.

Entonces, ¿Por qué las multitudes no quieren aprender la sabiduría? ¿Por qué desprecian, aborrecen, o ignoran la importancia de la sabiduría? La razón queda en la falta de reverencia y temor a Jehová en sus vidas. Para estos, la sabiduría y el andar en la voluntad de Dios no tienen valor, y ellos desprecian la bendición de Dios.

Prov 1:7 …Los insensatos desprecian la sabiduría y la enseñanza.

“Insensatos desprecian” Los vanos que no tienen sabiduría hace poca cosa de la sabiduría y la enseñanza. Nota que el insensato tiene intento en su corazón de odiar a Dios, su carácter y sus reglas. Jesús es la personificación de la sabiduría (Prov 8), y él es “la Sabiduría de Dios” (1 Corintios 1:24). De despreciar la sabiduría es una ofensa personal en contra de Dios. Estos necios, insensatos son bien difíciles de ayudar, no porque no podemos, sino porque ellos mismos no quieren vivir bien, quieren sufrir. Prefieren la necedad que la sabiduría.

1 Co. 1:21 Pues ya que, en la sabiduría de Dios, el mundo no conoció a Dios mediante la sabiduría, agradó a Dios salvar a los creyentes por la locura de la predicación.

O sea, la sabiduría y enseñanza guían a uno a conocer el evangelio, Jesucristo el Salvador. Esto es el punto exactamente. Los insensatos están en amor con el Diablo, Satanás, y odian a Jesucristo el Salvador.

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